domingo, 17 de junio de 2012

Sobre la riqueza mundial y su control.



Los movimientos de capital  vs. el PIB mundial.

” Los mercados” es el eufemismo utilizado habitualmente para designar a los sistemas financieros mundiales, es decir,  el conjunto de bancos, sociedades de inversión, compañías de seguros, sociedades gestoras de fondos de pensiones y de fondos especulativos, así como sociedades de correduría de bolsa que compran y venden esencialmente cuatro tipos de activos: divisas, acciones, bonos de los Estados y productos financieros derivados.

Para tener una idea de la colosal fuerza de dichos sistemas financieros mundiales, los “mercados”, basta con comparar dos cifras: cada año, la economía real , empresas de bienes y servicios, crea en el mundo una riqueza  (PIB)  estimada en unos 45 billones de €, mientras que, en el mismo tiempo, a escala mundial, los “mercados”  mueven capitales por valor de 3.450 billones de €. O sea, setenta y cinco veces lo que produce la economía real.  

La economía real, Bienes y Servicios, son normalmente facturados, controlados, y sometidos a tasación, con el IVA por ejemplo. Este no es el caso de los movimientos de Capital, cuya trasferencia es virtual por fibra óptica, y por ahora no sometida a una tasa de transacciones financieras (TTF). El Capital es el único bien realmente globalizado en el mundo, los Bienes y Servicios lo son en menor medida, y el Trabajo en menor medida aún, ya que aunque se trasladen producciones, difícilmente se pueden trasladar masivamente personas por razones humanas, culturales, lingüísticas, formativas, etc…, salvo con lentos y dolorosos procesos migratorios.

El % de propiedad vs. el % de control.                      

En otro orden de cosas, en la teoría liberal, la promesa del Estado no es la igualdad de oportunidades, ni la fraternidad, ni la justicia social como  en el caso del modelo social europeo, sino la promoción social asociada al mérito y al esfuerzo individual, también llamada a veces “american way of life”.

Pero es bien conocida la idea de que el control económico está concentrado.

En el mundo, el 80% de los ingresos totales lo obtienen el 5-10% de los agentes económicos, pero en contrate con ello, el 80% del control económico total lo detenta únicamente el 0,61% de los accionistas.

Incluso los pequeños grupos de empresas nacionales ligadas mediante cruces de acciones pueden actuar como un bloque. Esta es la razón por la cual las agencias nacionales antitrust les controlan desde cerca. Los bloques internacionales de corporaciones financieras elevan este asunto a un nuevo nivel, al no existir las correspondientes entidades globales que controlen sus actividades.

Las principales implicaciones de este hecho vienen de la identificación del núcleo de esta red de actuación como una supraentidad económica. Este tipo de estructura tiene profundas implicaciones en dos aspectos: la competencia en el mercado, y el riesgo financiero sistémico o global.

La Competencia en el Mercado

Los cruces y vinculaciones accionariales reducen significativamente la competencia en el Mercado. En consecuencia, las instituciones antitrust o antimonopolio del mundo entero se toman muy en serio la existencia de complejas estructuras de cruce y vinculación accionarial. Sin embargo, les faltan las herramientas analíticas y cuantitativas para tratar este tema de las extensas redes de vinculación.

El Riesgo Financiero Sistémico

Durante años, la teoría económica ha mantenido la idea de que las redes financieras interconectadas son más estables. Por el contrario, recientemente, tanto los académicos como algunas  autoridades, predicen que los altos niveles de interconexión entre las instituciones financieras pueden conducir a un riesgo sistémico financiero más elevado.

En esencia, si el sistema financiero global está interrelacionado, las disfunciones financieras se propagan a todas las grandes instituciones como una enfermedad contagiosa, lo cual es por supuesto extremadamente indeseable para la economía de todo el mundo. Pero es eso precisamente lo que ha ocurrido en el desastre financiero mundial que está teniendo lugar ahora en el mundo. Sorprendentemente, no hay investigaciones relativas a lo intrincado que está el sistema financiero mundial global.

Una investigación sistémica podría validar la suposición de la relación existente entre la eficacia o rentabilidad de una corporación y su posición funcional en las relaciones de semejante red. Especialmente, si la pertenencia a una supraentidad suministra una ventaja competitiva medible. Otra cuestión afecta a la idea del potencial control de las instituciones financieras.

Lo que es aún más, los vínculos de propiedad están frecuentemente acompañadas de otros tipos de vínculos financieros, tales como créditos, contratos, etc… Este tipo de aspectos no se difunden por razones estratégicas, y sería una cuestión de interés público el conocer si ocurre, y de qué manera ocurre, el que las redes de propiedad actúen en su provecho, lo cual abre en general la cuestión de cómo evolucionan las redes y vínculos de propiedad.

Se puede presuponer que pueden estar presentes muchos y diferentes tipos de redes y vinculaciones en las que funcionen mecanismos para hacer más ricos a los ya ricos.