sábado, 22 de marzo de 2014

Los griegos y el aburrimiento.





Los griegos, que no tenían esperanzas ultraterrenales, conocían la crueldad de la naturaleza que vive de la muerte de los individuos que engendra y, sobre la base de esta visión trágica, enseñaban a resistir el dolor y, durante el breve tiempo que nos es concedido vivir, a llevar una “vida buena” que, bien llevada y no dejada a merced de los acontecimientos, podía ser incluso una vida feliz. Activos durante el tiempo que nos es dado vivir, no pasivos porque estamos “en las manos de Dios”.

Y estamos activos cuando vamos con la esperanza hacia el tiempo y no cuando con la esperanza aguardamos a que el tiempo venga hacia nosotros. Cuando la espera no la habita la esperanza, aparece el aburrimiento, el futuro pierde impulso y el presente se extiende en una consistencia opaca donde el tiempo objetivo, el del reloj, marca su ritmo sobre el tiempo vivido que se ha atascado, hundido, detenido.
(Umberto Galimberti)
 
 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario